jueves, 17 de julio de 2008

LOS CÓMICS DEL ANGELVERSO


Fue por 2007 que la editorial NORMA comenzó a publicar una serie de tomos recopilatorios de historias de ANGEL en formato cómic que se ambientaban en sucesos posteriores a los de la 5ª temporada, punto en el que se suspendió esta serie televisiva spin-off de uno de los personajes aparecidos en BUFFY CAZAVAMPIROS. En general, contaba las andanzas en la época en que vive Buffy de un personaje que tras su muerte y vampirización fue rescatado por unos gitanos de las entrañas de un cuerpo dedicado desde aquello al culto de la belleza que le producía la muerte. Ajeno a los deseos y pasiones del demonio que habitó su cuerpo, ahora vive atormentado por las atrocidades que aquél causó, que muchos aún siguen atribuyéndole, y además sobre él pesa la maldición de que si en algún momento goza de un solo instante de plena felicidad volverá a dejar paso al vampiro Angelus. Con estas premisas comenzó su propia andadura en televisión y, como en su serie madre, se llenó de otros personajes y situaciones que terminaron por conformar un nuevo e interesante universo propio relacionando la temática superheroica con la brujería y la magia. Inmortal, eternamente joven y hasta con papada en la última temporada los argumentos se mantuvieron frescos y no dejaron de sorprender continuamente.

Los títulos de los cómics que en España hemos podido contemplar desde entonces han sido: La maldición, Viejos amigos, Spike, Spike vs. Drácula, En el punto de mira, Manicomio y Auld Lang Syne. Todos ellos se caracterizan, en cuanto al guión, por lograr una correcta ambientación al punto que nos hace parecer que estamos contemplando más capítulos de la serie. Los dibujos, algunos parecen fotogramas, y en otros se hace un esfuerzo por iconizar lo que representaba cada personaje a través de peinados, facciones o vestimenta. Factores que también ayudan a conseguir transportarnos a la serie son las alusiones al pasado de los personajes o a capítulos en concreto ya emitidos; o la descripción de algún aspecto concreto de un momento o un secundario de la serie, incluso se reaviva la rivalidad Angel-Spike.

Sin embargo, acostumbrado a la narrativa de JOSS WHEDON y del equipo que se supo rodear (apoyo que es de resaltar) no se aprecia en estos cómics la reinvención continua de los argumentos, el último término a que se llevaba cada concepto, la aparición de más personajes con potencial, la importancia de los diálogos, etc. Más bien vemos representada una congelación de la 5ª temporada, que se ha perpetuado y por hacerla con mimo funciona, bastante bien, por cierto. A la espera de que NORMA nos ofrezca la 6ª temporada de ANGEL también en cómic como ya ha hecho con la de BUFFY, estaremos atentos a si se tienen en cuenta estos capítulos o sólo ha sido un alucinógeno que nos estimulara mientras el material auténtico se forjaba.

A destacar de estos tomos, dos: La maldición, por ser el más flojo; y Manicomio, de Brian Lynch y Franco Urru, que es probablemente el título más fresco. Éste sí hubiera podido ser un capítulo o un arco argumental más de la serie, incluso ese nuevo spin-off de otro personaje más, SPIKE, del que tanto se ha especulado en los rumores de la red. Este vampiro pícaro y oportunista, de marcado carácter, que es el único que no cambió de personalidad cuando fue vampirizado ni cuando recuperó por medios propios su propia alma de nuevo, indeciso ante su porvenir, a la vez muy empírico y atado al momento, eternamente secundario, pero además siempre independiente y capaz de funcionar a la vez en las dos series, BUFFY y ANGEL. Después de haber estado junto a los Scoobies bajo la falda de Buffy, y con los chicos de Angel por obligación de Los Poderes, por fin se larga en solitario a vivir sus propias experiencias y lo más importante es que por 1ª vez se plantea ser héroe porque sí, no por obligación de sus intereses, de la circunstancia, o de un ente superior. Le quedan 2 opciones: usar sus dotes para salvar su propio pellejo, salvar el de gente con cierta moral a su alrededor, o ambos. Un dilema para su vitalismo y una encrucijada digna de hojear cuanto menos.